lloré:
Y mis lágrimas arrastraron simientes
y quedaron sepultadas
-secas-
bajo un río de piedras.
Grité:
y mi voz resonó,
y volvió,
muda y cansada
de rodar por laderas de montañas.
-apenas un eco tembloroso-
Callé:
Y el silencio
obscureció mi alma
y quedé perdido en la sombra
de las cosas inertes.
Caminé…
Nene del bujero:
ResponderEliminarbonito, bonito...
pero me gusta más lo del arado en el foro del Mono...
A lo peor hasta te hago un psicoánalisis de esos tres versos.
por cierto, te hecho en falta, jodio...
a ver si te conectas al msn algún día...
y mi blog ha cambiado, ahora es:
http://almadelfines.blogspot.com/
besos
campeón