Está ahí, justo donde esperaba. Dios, está preciosa esta noche. Busco dentro del abrigo y saco lo que andaba buscando, es un poema. Estoy casi llorando de la emoción, pero me contengo y comienzo a leer.
No puedo creerlo, esa puta se ha reído de mí. No merecía ni el aire que respiraba.
Jack (21 de julio de 1888)